TERRITORIO I
La base de la cadena alimenticia reposa en los suelos productivos, porque, aun la producción cárnica depende de la conversión de consumo de granos y forraje por el ganado. En este sentido, la primera labor para la alimentación humana está en la labor agrícola para la producción de granos, frutos y hortalizas. El aumento en rendimientos y adaptación a condiciones regionales de estos cultivos ha sido posible por el desarrollo de la tecnología, desde el uso de fertilizantes hasta el fitomejoramiento de las especies e incluso la ingeniería genética.
Los esquemas de producción intensiva, agrícola y pecuaria, pretenden optimizar los recursos económicos para lograr la más alta producción, generalmente a costa de los recursos naturales y de algunas biomoléculas de valor nutricional. Fue hasta que el clima cambio de manera sensible cuando se empezaron a tomar en serio conceptos como “desarrollo sostenible” y “resiliencia”.